¡Y hay poetas que son artistas y trabajan sus versos como un carpintero las tablas!

viernes, 8 de junio de 2007

Hotel


Hotel San Martin (una estrella, quizá menos)
Av. Callao
Bs As, Arg. (Los Porteños abrevian todo lo que la lingüística permite, y lo que no)
Sábado. 1:38 a.m.

Parpadeante welcome en rojo tras el cristal junto a la puerta,
Feng-shui la campanita contra mi frente
da ritmo al azul violáceo del iris en la mirada que me mira,

Bien ensayado discurso de la rubia tras la repisa,
30 pesos la noche, ¿fumadores?…
mi vista dibujaba con cuidado cada línea en su escote,
labios chocolate oscuro en perfecta armonía con la blusa, efectivo tarjeta, gracias que descanse, mi cara de tristeza
es mal anzuelo para ese pez.

El botones pregunta por mis maletas, le he dicho que solo vengo con mis miedos,

y esos,

los cargo yo.

Pasillo elevador segunda planta a la izquierda tercera puerta, alto.
Lentamente la llave penetra la cerradura,
el sonido del roce de metales llena todo el pasillo, o a mí me lo parece,

Flashback


He visto sin certeza tu cuerpo inmóvil,un ejército de llamas corren, olas poderosas,las venas y la carne se golpean contra la piel,el relámpago y la quemadura.


Mismo sábado. 1:53 a.m.


Cuarto para dos parados par de dos,
Ducha caliente, jabón pequeño de esos de los hoteles de una estrella, rosa, demasiado perfume y soledad.

Bs As está demasiado al sur te dije, México muy al norte respondías, tu cuerpo era fácil de olvidar,
me preocupaban tus ojos, tu voz de tango.

Encendí mi último cigarrillo mexicano, Delicados sin boquilla,
bocanada grande, miedo grande y grande te olvidaba en aquella habitación de una estrella en la Av. Callao. Calla´o también yo, te consumía como a mi tabaco y te olvidaba y me olvidaba de tu cuerpo,
pero no de tus ojos, no del tango que te salía por los labios.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Qué bien que escribes...

León Cartagena dijo...

Gracias.

Trato de no escribir, si no de traducir mi vida.

Un abrazo