¡Y hay poetas que son artistas y trabajan sus versos como un carpintero las tablas!

jueves, 3 de abril de 2008

Como dos extraños

alguna vez amé a una mujer que no existe:

Tan distinto es el amor,
cuando lo que se ama es un caldo
que derrama una vasija impalpable.

Ahora que me dejen tranquilo
los fantasmas, tus ojos,
el manantial de luz que exhalas.

Que distinto el amor, que diferente,
cuando no tengo ganas de matarte,
que no ahondo la mano para acariciarte
la hendidura húmeda e infinita.